viernes, 20 de noviembre de 2009

Un pomelo

Me alucina la idea de convertir lo cotidiano en algo maravilloso. Lo ordinario en algo mágico. Con el paso del tiempo el hombre se ha preocupado de convertir en extraordinario algo que ya lo era. Pero a mi no me interesa eso. Me gusta ver lo normal subido de nivel. Ver belleza en algo que aparentemente no la tiene. Descontextualizar objetos, formas y personas y cambiar nuestra visión de ellos al reproducirlos en un nuevo medio, formato o, valga la redundancia, contexto. Asi, aqui les presento, un pomelo.
Adiós,
J.

1 comentario:

  1. ... como Pablo Neruda, haciendo poético al tomate para siempre con su oda al mismo. Espero la tuya al pomelo.
    Estaré alerta a tus publicaciones.

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